El antecedente de la fotografía se encuentra en la cámara oscura. Desde el siglo V a. C. ya se empleaba la cámara oscura y con el paso de los siglos se fue perfeccionando.
No obstante, el origen de la fotografía se remonta al siglo XVIII cuando Thomas Wedgwood comenzó a realizar una serie de experimentos con el fin de fijar imágenes sobre un soporte permanente en el tiempo. No consiguió fijarlas, debido a que después de la exposición a la luz las fotos debían guardarse a oscuras, pues de lo contrario se volvían completamente negras, debido a que las sales de plata seguían presentes.
Niepce también comenzó a investigar a partir de la litografía, llegando a obtener las primeras heliografías. En 1826, realizó la que se considera la primera fotografía de la historia conocida como “Punto de vista desde la ventana de Gras”. Por esos mismos años, Daguerre, realizaba un espectáculo, el Diorama, a base de efectos luminosos y lienzos pintados y donde utilizaba la cámara oscura. En 1827, Daguerre se asoció con Niepce y ambos acordaron seguir investigando para mejorar el experimento de Niepce. Sin embargo, tras la muerte de este, Daguerre continuó con los experimentos pero denominándose como el único inventor de la técnica.
En 1837, Daguerre obtiene lo que denominó la técnica del daguerrotipo, que permitía fijar imágenes sobre una placa de mental.
Bayard fue otro de los investigadores y fotógrafos pertenecientes a aquella época pero que no tuvo el mismo reconocimiento que sus antecesores. Esto provocó que se hiciera un autorretrato titulado “El ahogado”. Años más tarde participó en la Misión Heliográfica e intervino también, en la Sociedad Heliográfica.
Henry Fox Talbot, fue el inventor de la técnica del calotipo en 1841. A partir de esta fue posible la imagen multiplicable. Además, Talbot publicó la primera edición fotográfica del mundo “Lápiz de la Naturaleza”.
David Octavius Hill destacó en el ámbito de la fotografía pues intentó mejorar la técnica del calotipo pero orientándolo a los retratos. El empleo de la técnica dio retratos con un efecto Rembrandt.
Blanquart- Evrad introdujo una mejora significativa al calotipo. Lo que hizo fue meter el papel humedecido dentro de la cámara, sujetarlo con dos cristales y el efecto del agua impedía que el papel se hinchara o se arrugara. Esto daba lugar a fotografías mucho más nítidas y con mayor calidad.
Niepce de Saint-Victor también mejoró el calotipo con la invención del papel albuminado, que permitía unos tonos y una nitidez muy superior a los primeros calotipos.
La Sociedad Heliográfica se fundó en 1851 con el objetivo de impulsar la fotografía. Se realizó la Misión Heliográfica, donde participaron numerosos fotógrafos de la época, cada uno empleando la técnica que preferían.
La primera imprenta fotográfica la fundó Blanquart-Evrard, donde imprimía fotografías de números fotógrafos que realizaban expediciones fotográficas por lugares nunca vistos o sitios de interés. En esta imprenta se publicaron varios álbumes fotográficos que tuvieron una gran aceptación entre el público.