-Condiciones, según Berrio, para que exista propiamente opinión pública:
- Libertad de informar e informarse.
- Existencia de un debate social libre.
- Opiniones manifestadas sean cultural y políticamente relevantes.
- Ciudadanos con capacidad crítica y que razonen con libertad de conciencia.
- La actividad política y el debate político más orientados hacia los medios que hacia las propias instituciones.
- Supeditar las ideas a los hechos, y estos a los hombres: el líder o candidato como comunicador y estrella de la comunicación.
- El hombre político como actor, y la vida política pública como espacio de representación.
- Traslado de técnicas de marketing, publicidad y persuasión a los procesos electorales.