miércoles, 15 de mayo de 2013

Todo sobre el reportaje de guerra

La fotografía de guerra es un género dedicado a las imágenes que ilustran los horrores de las guerras y los conflictos humanos en los cuales la vida pierde su valor y se captan imágenes que nos recuerdan a que niveles puede llegar la maldad de un hombre, cuando se trata de intereses mezquinos y ansias de poder.
La diferencia fundamental entre este género y otros, es que en los cuadros expuestos no se muestra solo gente muerta sino esencialmente vidas humanas truncadas. Esas vidas son para quien las toma, escenas cruciales grabadas en su retina que pueden expresar espíritu crítico, humanismo o solidaridad. Así, todo lo que entra como instantánea en ese cuadro es un interior vivo en el que se describen los juegos de motivaciones de los personajes: soldados, líderes militares, civiles refugiados o en éxodo. La devastación de los campos de batalla – el fondo- puede subrayar el orgullo totémico de la fuerza desplegada por un oasis, puede ser parte de la propaganda y aun el testimonio de los aciertos de las acciones de la guerra.

¿Que lleva a un fotorreportero hasta un lugar de guerra? La clara percepción de la amenaza de la muerte que se cierne sobre su propia cabeza. Tal vez también, la difusa convicción de que el registro de un episodio bélico se convierta en icono o signo de una memoria colectiva duradera. ¿Y el horror? El manejo mediático de la crueldad se apoya en una de las características generales de la fotografía como son ciertos fenómenos psíquicos de la recepción de la imagen. Una imagen aislada de la guerra se la entiende por una imagen global, es decir que la metonimia sugerida permite percibir el todo de una guerra que siempre es impensable. Paralelamente, la fotografía de guerra que mezcla información y arte, es susceptible de manipulación, fotomontaje y fraude. Sin embargo, existen archivos de fotografías de autor anónimo tomadas durante las guerras, siempre mucho más infames pero mucho menos crueles.