1. La claridad ante todo. "Una frase tiene que estar construida de tal forma que no solo se entienda bien, sino que no se pueda entender de otra manera" (Grijelmo).
2. La ordenación lógica.
3. La sorpresa, el humor y la ironía en el estilo. Son propios del estilo literario, pero el periodista en un texto informativo-interpretativo puede tomarse algunas licencias. Veamos algunos tropos que se utilizan con este fin:
-La metonimia: usada en expresiones del argot deportivo. Ejemplo: "golpeó el cuero", "defender la camiseta".
-La sinécdoque: "Londres recomienda a los británicos en Siria que salgan del país cuanto antes".
-La personificación: "es un pueblo que se ha encaramado a la montaña".
4. El vocabulario. Forma parte del estilo, de modo que cuanto mayor sea mayores serán las posibilidades estilísticas. "Si queremos disponer de un buen estilo no queda más remedio que practicar el placer de la lectura de modo que las palabras vayan almacenándose mansamente en nuestra memoria. No hay duda de que saldrán a nuestro teclado cuando más las necesitemos" (Grijelmo).
-No significa utilizar un vocabulario desconocido.
-El uso de adjetivos en la información debe ser sobrio: deben aportar información y nunca juicios de valor. Se debe huir de los más coloquiales y primar un lenguaje rico y variado. Ejemplo: "angosto" por "estrecho".
-Según Armentia Vizuete y Caminos Marcet, el lenguaje periodístico no es un tipo de lenguaje coloquial, y tampoco es un lenguaje estrictamente literario. Por ello, en la construcción de un texto informativo hay que huir de las expresiones literarias, tanto como del lenguaje excesivamente coloquial.
-Según ambos autores, éstas son las normas que deben aplicarse a las noticias:
- Los textos informativos deben ser claros, concisos y fluidos.
- Oraciones breves y simples.
- Párrafos no muy largos.
- No es un lenguaje telegráfico.
- Paréntesis y guiones.
- Contextualizar los hechos.
- Ni opiniones ni comentarios.
- Lo escrito en los diarios impresos se lee al día siguiente.
- En las declaraciones orales se emplea el pretérito perfecto simple (indefinido).
- En las declaraciones no hay que respetar el orden cronológico.
- No se puede redactar en primera persona.
- No hay que emplear conectores innecesarios.